Comienzos de conductas delictivas

Sabes que es adolescente, y que es normal que desee desafiar las normas, pero en ocasiones puede que esa trasgresión sea grave y alarmante. En muchas ocasiones las conductas delictivas tienen lugar tras un periodo de conflictos que han ido en aumento.

Nos podemos encontrar ante situaciones de rotura de objetos de otras personas o de lugares públicos, pelearse o agredir a personas, molestar a personas desconocidas, gastar bromas pesadas a la gente, robos, estafas, etc. La suma y reiteración de estos actos suelen ser la voz de alarma definitiva que moviliza a la familia para pedir ayuda, la tensión en casa se va acumulando y hay cada vez más enfados y discusiones. Es normal sentirse desubicado o desubicada o con miedo ante estas situaciones, sin saber muy bien cómo abordar todo lo que está ocurriendo. No sabemos de dónde surge todo esto que está ocurriendo puesto que no concuerda con los valores que se les ha inculcado.

Diversos factores son los que hacen que una persona sea más vulnerable y propensa a realizar conductas delictivas. El ambiente familiar y el social importan, así como, el fracaso en diferentes áreas de sus vidas, el tener menos herramientas u oportunidades para hacer frente a situaciones, mala canalización de las emociones (enfado, tristeza, agresividad, etc.), amistades y grupos de iguales que ejercen presión grupal, etc.

Los y las adolescentes pasan por etapas donde experimentan bajo diferentes roles, intentando adaptarse tanto al medio y al grupo de iguales, como a uno o una misma. En esta etapa los amigos, las amigas y el ocio son muy importantes para ellos y ellas. La suma de diferentes características puede que lleven a una persona a situarse ante situaciones que supongan un reto y un riesgo, que pueden estar dispuestos a asumir: a veces impulsado por el grupo iguales, y otras veces por una concatenación de malas decisiones. Estas situaciones pueden perdurar y ser graves.

Sea cual sea el caso, es el momento de actuar con prontitud para reencauzar la situación y permitir al o a la joven que continúe desarrollándose adecuadamente.

Desde Gizakia te podemos ayudar. Desde el nuestro equipo de profesionales experto en la adolescencia y juventud, con un largo recorrido en el abordaje de las situaciones que se pueden vivir en ese rango de edad, ofrecemos una intervención integral y especializada, para poder ayudarte con diferentes situaciones que puedas estar viviendo.

¿Cómo es la intervención en situaciones donde haya conductas delictivas?

El tratamiento que ofrecemos en Gizakia es de tipo integral. Es decir, ofrecemos una ayuda de desde una perspectiva biopsicosocial, teniendo en cuenta tanto la parte física, la parte emocional o psicológica y la familiar o social.

De esta manera se integran todas las áreas que puedan repercutir en la situación y bienestar de la persona, ya que entendemos que cada situación y cada persona además de ser singular y única, estar compuesto por diferentes interacciones con el entorno y el ambiente más cercano, y que la suma de todas las partes hacen que se pueda entender en su totalidad lo que está ocurriendo.

Los planes de intervención que realizamos en Gizakia son individualizados, es decir, se realiza una valoración personal e individual. Así, el tipo de atención, la intensidad de la misma y la modalidad de intervención se ajustan a las necesidades de cada persona.

Se plantea un itinerario de trabajo teniendo en cuenta las situaciones concretas con las que se acudan al programa, pudiendo realizar una coordinación con diferentes recursos si fuera necesario.