Egoitza-arretako zentroa

Si bien en el tratamiento de las adicciones cada persona avanza a ritmo diferente, por lo que no existe una duración predeterminada de tratamiento, nuestro horizonte está estimado en un plazo de 6-9 meses en función de la gravedad de las distintas áreas de la persona, con excepciones de tratamiento de más de corta estancia definidas dentro de la valoración integral diseñada en el primer mes de tratamiento.

Evidentemente, cualquier salida que proceda a cualquiera de los organismos o instituciones sanitarias, jurídico-legales, de empleo y/o sociales estarán autorizadas desde el primer día de ingreso en el Centro. En todas estas salidas, se buscará en un principio la posibilidad de contactar con algún acompañante del proceso para que acuda a la cita junto con la persona en tratamiento

Para la atención que ofrece Fundación Gizakia la familia también es un eje en que basamos nuestra labor. Dentro de estas visitas separamos en diferentes tipos de familiares o allegados/as a los que pasamos a detallar:

Parejas: muy similar al apartado anterior, pero teniendo en cuenta, la individualidad y casuística de cada caso, la pareja puede convertirse en el principal elemento de contacto y de intervención terapéutica en el servicio.

Hijos/as: las personas que sean madres o padres pueden recibir la visita de sus hijos/as (especialmente si son menores) desde el primer fin de semana de ingreso hasta el último. Entendemos que el ingreso en un recurso de tratamiento no debe ser un obstáculo para el vínculo materno/paterno filial y en ese sentido nuestra atención permite a través de sesiones individuales y grupales el abordaje de la maternidad y paternidad de las personas usuarias.

Otros familiares: En función del familiar y el grado de relación con la persona en tratamiento pautamos una serie de visitas. Estas visitas se valoran en función de la relación familiar y de la vinculación previa al ingreso. Es importante destacar que muchas de las personas que se incorporan a la atención residencial tienen problemáticas familiares donde resulta más que conveniente en un primer momento un espacio donde poder identificar, elaborar y proponer nuevos estilos de relación que en muchos casos necesitan un tiempo para poder ser realmente "nuevos".

Para el abordaje de esta relación familiar proponemos no sólo la terapia psicoterapéutica individual y grupal para las personas en tratamiento, sino plantearemos a lo largo del proceso una serie de entrevistas familiares (en función de la evolución y demanda de las personas y familiares) donde poder establecer el marco de este "nuevo patrón de relación familiar" que anteriormente hemos definido.

Amigos/as y red social: para el abordaje de las adicciones volver a reestructurar la red de amistades es otro de los ejes principales. Poder contar con las visitas de amistades de la persona dentro del recurso supone en muchos casos un aliciente y elemento motivador de cambio, así como un apoyo, para el proceso terapéutico.

Como señalábamos anteriormente nuestro Centro de Atención Residencial está concertado con la Red de Salud de Bizkaia. En el caso, de que la persona a tratamiento acuda derivada por cualquiera de los dispositivos de los que dispone la Red en el Territorio Histórico de Bizkaia (Centros de Salud Mental o Módulos Psicosociales principalmente) el coste del tratamiento es gratuito, salvo los gastos ocasionados por la medicación, productos de aseo personal y tabaco principalmente.

Adicionalmente, Fundación Gizakia dispone de plazas de pago para personas que no puedan ser derivadas por la Red de Salud Mental de Bizkaia o que deseen realizar un ingreso inmediato.

La labor fundamental del Centro consiste en la Rehabilitación Integral de la persona. Para ello, a la persona que se incorpora se le plantea un Itinerario Terapéutico Individualmente diseñado para la consecución de Herramientas y Competencias personales que le permitan el abordaje exitoso de su problemática adictiva.

El día a día consiste en una Participación Activa y Protagonista en el conjunto de tareas y actividades comunitarias del recurso. Durante su estancia no sólo figurará una atención constante e intensiva, con sesiones, talleres, entrevistas, grupales e individuales con los/as diferentes profesionales del recurso, sino que, además, el área educativo social le permitirá aprender y desarrollar "Habilidades para la vida cotidiana".

A través de los distintos sectores de ocupación se favorece el aprendizaje y desarrollo de las tareas propias de la gestión de una vida comunitaria facilitando uno de los principales ejes y objetivos del abordaje, que no es otro que el de conseguir la mayor autonomía posible para la posterior inserción social.

Además, este aprendizaje y el desarrollo de estas habilidades, van unidas a un abordaje especialmente significativo en el terreno educativo y por extensión en el terapéutico, que tiene relación con los "Hábitos de vida saludable" en los que se engloban el sueño, la alimentación, el autocuidado, el deporte, …

Junto con estas habilidades, dentro del terreno más propiamente educativo, se establece también una asignación de Responsabilidades dentro de las Tareas y Actividades del propio Recurso. Con estas Responsabilidades se termina de completar un ciclo teórico-práctico de "Habilidades Sociales" que no sólo van en relación a objetivos teóricos diseñados en el Plan Individualizado de Rehabilitación, sino que son perfectamente prácticos en estos espacios educativos en donde la Responsabilidad, Toma de Decisiones, Resolución de Conflictos, Saber decir NO, toman una transcendencia en la práctica como en pocos servicios de atención que se ofertan.